Trabajar con una encimera de cuarzo para realizar ajustes puede ser un reto, pero no imposible si se cuenta con las herramientas adecuadas. El cuarzo es un material compuesto que generalmente consiste en alrededor de un 90% de cuarzo natural combinado con resinas y pigmentos. Esta combinación le da una dureza significativa, situándose en un 7 en la escala de Mohs, lo que significa que necesitas herramientas específicas para cortarlo sin dañarlo.
Usar una sierra de diamante es fundamental. No cualquier sierra sirve, ya que las tradicionales no podrían soportar la dureza del material. Las sierras de diamante están diseñadas precisamente para cortar materiales duros y resistentes como el cuarzo. Un ajuste incorrecto podría resultar en un quiebre inesperado, lo cual puede ser costoso si consideramos que el precio medio de una encimera de cuarzo puede variar entre 200 y 600 euros por metro cuadrado, dependiendo del diseño y del vendedor. Por lo tanto, evitar errores que podrían terminar en pérdidas económicas es crucial.
Al abordar este tipo de tareas, también debe tenerse en cuenta que el cuarzo no es poroso, lo que le confiere resistencia a las manchas y a las bacterias, una característica valiosa en cocinas donde la higiene es esencial. Sin embargo, esta propiedad también significa que el material puede ser menos flexible durante el proceso de corte. Para aquellos que no cuentan con experiencia, acudir a un profesional puede ser la opción más segura y efectiva. Empresas especializadas en superficies de piedra recomiendan encarecidamente a los inexpertos no intentar cortar encimeras de cuarzo por su cuenta.
¿Es recomendable asumir el riesgo de cortarlo uno mismo? Los expertos aconsejan no hacerlo. Contratar a un profesional para que realice el ajuste estructura el proceso y evita complicaciones. La precisión es clave al trabajar con este material; un error menor podría arruinar la integridad de toda la superficie. Además, el uso de equipos de protección personal como gafas y máscaras respiratorias es indispensable, ya que el corte produce polvo de sílice, el cual es nocivo si se inhala en grandes cantidades.
En resumen, preparar adecuadamente el entorno y contar con las herramientas correctas son factores decisivos para trabajar con cuarzo de forma exitosa. Además, es recomendable considerar un presupuesto adicional para imprevistos, que podría aumentar el costo final hasta un 20%. Es un esfuerzo considerable, pero la calidad y la durabilidad del cuarzo suelen compensar las dificultades iniciales que puedan surgir durante los ajustes.